martes, 31 de enero de 2012

1° de Bachillerato - 11° de parvulitos

Después de la entrada de ayer, que sé que os gustó (al menos a unos pocos) hoy toca otro poquito de irasosiá (pero muy light).

Esta tarde venía dispuesto, cual friki de la educación y la política, a ver en directo la comparecencia del ministro en la Comisión de Educación y Deporte. Pero entre que he llegado a mi casa sobre las cuatro sin comer (con un flamante empaste) y que lo que menos me apetecía en ese momento era escuchar con atención, se me pasó por completo y la pillé empezada.

Pero empecé a verla.

Lo primero, desde este mismo momento me declaro fan absoluto de la web de rtve. Y que eso lo diga alguien que es fan "sólo" de 1243 grupos de facebook tiene su mérito.

Mientras la veía saqué algunas conclusiones:

Yo tenía complejo de ser relamido hablando a veces. Después de escuchar al ministro, ya no. Aún así, me gusta que pronuncie de forma más o menos decente en alemán (aunque con su apellido no me extraña), francés e inglés (estos dos últimos por lo que me han dicho, que fue antes de que yo llegara).

Otra de las cosas que me han quedado claras es que una reunión de la Comisión de Educación y Deporte se puede alargar, violando todas las leyes de la física, ralentizando el tiempo hasta el absurdo. Vamos, que ha durado más de cuatro horas; pero no me extraña porque ha habido:
1) Comparecencia del ministro
2) Réplica de cada uno de los grupos parlamentarios (del grupo mixto más, porque ha hablado cada partido)
3) Réplica del ministro a las réplicas
4) Réplica de cada grupo a la réplica del ministro
5) Conclusión final o réplica del ministro a las réplicas de los grupos a la réplica del ministro a las réplicas de los grupos a la comparecencia del ministro.

Si lo único que me interesase fuese la comparecencia, donde explica los objetivos de su ministerio, me lo podía haber ahorrado todo. La acaban de colgar en la página web del ministerio. Pinchad aquí si queréis leerla. Pero en verdad también me interesaban las réplicas (y ahora es cuando mi nivel de frikismo ha aumentado). Eso sí, cuando llegaron, mi capacidad de atención había disminuido considerablemente, así que tampoco he hecho mucho caso.

Creo que va a pasar mucho tiempo antes de que me decida a ver otra comparecencia en el Congreso.

Por fin me ha quedado clara la reforma de la Secundaria que pretende realizar.
La ESO se acaba en 3° con 15 años, y al año siguiente, ya pueden los alumnos entrar en Bachillerato o en Formación Profesional.

Tanto el Bachillerato como la Formación Profesional duran tres años, con lo cual, se acabarían con 18 años, como ocurre en la actualidad.

Ante este panorama me surgió una duda, y creo que también le surgió a alguien más, porque la respondió de buena gana en su réplica a las réplicas. Os diría a quien se le ocurrió, o al menos de que partido era, pero sinceramente no me enteré, porque entre medias comí, hablé con mis padres, chateé y actualicé facebook y twitter.

En fin, la duda (que creo que ya la planteé el jueves pasado) es: con quince años uno recibe su título, pero pongamos que no quiere seguir estudiando; sin embargo se le obliga a quedarse un año en 1° de bachillerato o en 1° de F.P. (que si no quiere estudiar, me estoy imaginando que no va a tirarle para el Bachillerato) y cuando acabe ese año puede irse alegremente. ¿Qué sentido tiene convertir 1° de Bachillerato (que al final seguramente sea 1° de FP) en una guardería donde tener vigilados y entretenidos a adolescentes que no quieren estudiar y que al año siguiente pueden abandonar alegremente?

La respuesta del ministro fue lapidaria (para lapidarlo, quiero decir): "Si un alumno ha superado un tercio de los estudios, seguirá hasta el final, porque eso es lo lógico".

El jueves escribí que estaba a favor de la reforma que proponía. Pero así, no.

Del Bilingüismo y Educación para la Ciudadanía ya hablo otro día... o no.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

De magnífica, no baja la calificación de tu reflexión.

Otra vez vemos cómo se legisla dentro de esa esfera de cristal oscuro desde la que no se ve la realidad.

Estoy actualmente en la universidad, y con el plan Bolonia se obliga a las universidades a impartir conocimientos en inglés en todas las asignaturas.

Hasta ahora lo más completo que he recibido ha sido un texto en inglés que había que leer y responder luego un test en español. Ése es el nivel, ésa es la formación que recibimos los que hemos hecho lo "lógico".

Un saludo afectuoso,

EF

PD: Has ganado un seguidor.

afra dijo...

Eduardo, muchas gracias por toamrte el tiempo de leer la entrada y por decir que es magnífica.

Bienvenido al blog :)

De los métodos para enseñar inglés que hay en España se puede escribir no una entrada, sino todo un blog.

Quizá tengo una posición privilegiada, porque he enseñado idiomas en EEUU (español), Alemania (español e inglés) y en España (inglés) y así que puedo comparar y creeme cuando digo que la forma de enseñar inglés en los insitutos españoles es muy mejorable.

La idea de que parte de la enseñanza de la universidad sea en inglés me parece bastante positiva; pero la forma en la que se está aplicando esa idea desde luego no es la mejor.

Y otra cosa que es de risa es cómo se están aplicando los programas de bilingüismo en los instituos; pero de eso ya habalré otro día.

PD: Tú también te has ganado un lector, a ver si así me entero de una vez cómo va esto de la economía :D

Morti dijo...

La respuesta lapidaria (para lapidarlo) de este ministro responde a una sencilla razón: este señor, como la mayoría de los que está decidiendo por nuestro futuro, jamás ha sido alumno de un colegio en una zona marginal, ni ha tenido a sus hijos en un instituto donde la mitad de las niñas de 15 años se queda preñada, y ni se le pasa por la imaginación que existan realidades como que durante 40 años te despidan en las vacaciones y te contraten un mes después, para ahorrárselas, no sabe lo que es educar a sus hijos en ese ambiente, lo que es reciclar la ropa para todos los niños de la calle, vecinos y familiares por igual, o lo que es ir a la escuela a suplicar que le presten los libros a sus hijos porque se quedó en el paro y al no tener antigëdad en la empresa tiene un mojón de paro y apenas le da para comprar patatas y butano para hacer de comer para la familia. Porque si tuviera la más mínima idea de todo esto, nunca, jamás de los jamases, se le pasaría siquiera por la imaginación hablar de lógicas de este tipo.

Perdón por el desvarío, pero es que a veces algo muy pequeño me toca la fibra y me pongo mala. Mandaría a todos, todos los individuos en la cúpula de los servicios públicos (educación, sanidad, trabajo social) a hacer un internship de tres meses en mi barrio. Menudo cambio vería entonces.

afra dijo...

De desvarío nada.

Si quienes están en la cúpula de poder hubieran estado fuera de ella alguna vez en su vida, la realidad sería muy distinta.