domingo, 30 de diciembre de 2012

Resumen 2013

Enero
Primer fin de año sin fiesta en quince años, Salamanca, un Día de Reyes memorable, cinco días sin apenas dormir, infección de encías (que duele tanto que te despiertas del dolor), pensar en el pasado y echar de menos a demasiada gente (con final continuación feliz), reforma educativa, el año que viene no voy a tener trabajo #tensiónintrigadolordebarriga.
Febrero
A rogar el voto toca, y de repente llega el frío de Siberia y se me congela la casa por dentro, hago sardinas y mato las plantas de la cocina, penúltimo examen de inglés con mi BEJ, puedo esquipear y decido no hacerlo,  me han arreglado las encías y me dan cita para sacarme una muela, me voy de vacaciones de carnaval y me lo paso de lujo (sobrinos, sol, perolete, cena ancá Joseymari, concierto de The Midtimes), sofrito para toda una vida, sigo sin tener curro para el curso que viene #mástensiónmásintrigamásdolordebarriga
Marzo
Me aburro y hago pan ácimo, me cruzo media Alemania para hacer una entrevista a ver si esta #tensiónintrigadolordebarriga se acaba de una vez, Stellen Sie sich die nächste zwei Jahre in Niedresachsen vor, mejor no se lo cuento a (casi) nadie que lo gafo seguro, más recetas, me llegan las papeletas de voto a tiempo así que habrá que votar, me sacan la muela y me tiro una semana de baja, me llega el nombramiento en Niedersachsen no más #tensiónintrigadolordebarriga para los próximos dos años (al menos por este tema) ¿una ciudad? ¿en serio? ¡No me lo creo!
Abril
Empiezan las vacaciones, a darlo todo: Rincón de la Victoria, procesiones en Córdoba, hablar mucho inglés (casi más que cuando lo estudiaba), conocer a Luz y Lucía, la madrugá en el Natali (con eróticos resultados), Londres con Fra Uca, anulan las oposiciones, viene al poblado la gente de Agurain, merluza a la roteña, desaparecen los lectorados, pipol from Ibiza.
Mayo
Bofetadas de realidad, intercambio a Vitoria (mejor si cabe que el año pasado), nuestra Marta ya es funcionaria Beamtin, a Holanda a navegar, vacaciones de Pfinsgsten, Colonia, búsqueda infructuosa de piso ¿puede hacer más calor?, rumbo a Córdoba
Junio
Vacaciones en Córdoba: comida con novedades que ya todos conocíamos (y conocer a Irene), hablando un poco de todo hablemos de la ducha, cervecita con gente de la facultad, examen de la EOI, sobris sobris y más sobris. Vuelta al poblado, corregir, corregir, corregir, exámenes finales, selectividad, vista relámpago a Colonia, buscar piso y encontrarlo, Kartoffelsalat sin mahonesa, adiós pijama adiós, Abiball, Weindorf de Öhringen y alumnas no propias que me vacilan.
Julio
Visita al castillo, no para de llover, foto con Lederhosen, Experimenta, España Campeona de Europa, fin de curso-fin de año, positivismo, me duele España (otra vez, y ya van...), Saudade pero no mucha, estrés de fin de curso, Munich, mudanza express, fin de etapa.
Agosto
Playita pero poco, cumpleaños, Alicia, visita de Jerez, inflamación del nervio óptico que nos lleva al mirador de la Fontans, que si que no (pues va a ser que al final no), hacer un Don Pepe y dormir 45 minutos (mi vida es muy mítica últimamente, mucho, no demasiado), llegada a Osnabrück.
Septiembre
Empieza el curso, Hannover, Piesberg, primera Fortbildung, mira que me gusta esta gente, empieza el curso de verdad, mira que me gusta este cole, primera salida por Hannover, boda en Öhringen, Ü30Party en Celle quealegríaquealborotootroperritopiloto, salir en el periódico. Adios Víctor.
Octubre
Primeras visitas en Osnabrück, vienen los de Barcelona, Bremen, segunda Fortbildung, última clase antes de las vacaciones, Berlín por unas horas, vacaciones en Córdoba, bautizo de Alicia, notición notición, feria del libro, tengo claro que esta vez sí quiero quedarme.
Noviembre
Visita de Mercedes, Bremen, visita relámpago a Hannover, Eurovisión, noticias que te alegran el día por partida doble, y la gente venga a casarse, encuesta sobre entidades finanacieras en alemán, cómo recuperé mi bici, me lío la manta a la cabeza para un finde, Goethe 80 %, árabe, oposiciones de Castilla La Mancha, hacer una entrevista para enseñar en la universidad, mi padre en la red, Dorian Gray en el teatro.
Diciembre
Infección de garganta, la última visita en Osnabrück del año, nuestro enemigo el invierno es fuerte... pero un Zweiräder nunca se rinde, reencontrar a alguien importante en Skype, recibir una oferta para trabajar en la Universidad y rechazarla, finde en Stuttgart, llegan las navidades y yo con estos pelos, Navidad en Córdoba, pierdo el bus a Córdoba y me quedo de marcha con mi despoja favorita, salir de anises en Nochebuena, salir de cervezas después de Nochebuena, quedar a las nueve de la noche para desayunar y hacer tiempo cenando y bailando, después de casarme de improviso e ir a ser papá, me echan de Alemania, no saber donde pasaré Nochevieja y que no me importe.

Después de todo y por mucho que me queje, éste 2013 no ha estado tan mal ¿verdad?

viernes, 28 de diciembre de 2012

Se acabó

Una carta con membrete oficial le puede dar un vuelco a tu vida en quince líneas mucho más de lo que uno puede creer. Me acaba de llegar un e-mail de mi compañero de piso en Alemania diciéndome que ha llegado una carta del ministerio de educación de Baja Sajonia (quienes me han contratado) con malas noticias, como le di permiso para que abriera las cartas que pudieran ser urgentes y me las reenviara, eso ha hecho.

Resulta que por ciertos problemas burocráticos que ahora no vienen al caso, el contrato que firmé a principios de curso con mi escuela en realidad no es válido y que parece ser que no estoy cualificado para enseñar no ya en Baja Sajonia, sino en toda Alemania. Además como han decidido que estoy enseñando de forma fraudulenta, tengo que devolver todo lo que me han pagado estos cuatro meses o me denunciarán por estafa al estado federado de Baja Sajonia.

Así que ahora toca plantearse todo de nuevo. El proceso que empecé para que me reconocieran mi título y posiblemente quedarme para siempre por supuesto queda anulado de forma inmediata. Éste no es el mejor momento para buscar trabajo en España. Y marcharme a la aventura a cualquier otro país es algo que hoy ni si quiera me planteo. Bueno, en realidad, hoy no me puedo plantear muchas cosas.

Para ver la carta en alemán pinchad aquí y para verla traducida pinchad aquí.

martes, 11 de diciembre de 2012

Zweiräderarmee

Cada día se ven menos compañeros en las calles, los pocos que aún resistimos parecemos lobos solitarios en la estepa, pero aún así, no nos damos por vencidos. Brillando con luz propia avanzo por un camino que ya me sé de memoria, pero que nunca he visto con los ojos que hoy lo veo , un camino abandonado, tomado por las huestes enemigas, un camino por el que avanzo sintiendo la espada de Damocles sobre mi cabeza, un camino por el que antaño costaba caminar de lo lleno que estaba y que hoy sólo yo transito.

El general Invierno venció a Napoleón y a Hitler en Rusia, venció a Stalin en Carelia y ha vencido a cualquiera que haya osado enfrentarse a él. Pero no a mí. No a un miembro del Zweiräderarmee. Voy avanzando, poco a poco, sin prisa - un movimiento en falso puede ser fatal - con la mente en blanco, atento a cada detalle del paisaje que pueda serme útil o que me permita cruzar las líneas enemigas. De repente aparece otro Zweiräder, no nos miramos, no nos hablamos, no hace falta, sabemos lo que piensa el otro. Al poco tiempo toma otro rumbo, su misión es diferente y yo sigo avanzando entre los miembros del batallón de Hielo, poco a poco, sin hacer ruido, sin que me noten ¡¡¡MALDITA SEA, ME HAN CAPTURADO!!! Pero soy como un gato, siempre caigo de pie, recojo mi petate y mis utillajes y me vuelvo a poner en camino. Quienes se han rendido al ejército del general Invierno me miran con una mezcla de sorpresa, admiración y negación. Algunos piensan que estoy loco por seguir adelante. Quizá tengan razón.

No vuelvo a cometer el mismo error, avanzo mucho más despacio que antes, pero mucho más seguro, pedalada a pedalada, ralentizo el ritmo cuando tengo que girar, el batallón del Hielo y el de la Nieve me flanquean durante toda mi misión, pero a veces soy capaz incluso de aprovecharme de ellos. Vuelvo a tener que pararme, esta vez decelero mucho antes, no llego a frenar, me deslizo suavemente como una piedra de curling sobre la pista y engaño a las tropas invernales.

Estoy cercano a mi destino, ahora la situación es mucho peor, también la oscuridad se cierne sobre mí, tengo que agudizar todos mis sentidos, sobre todo tengo que mantener el equilibrio como nunca antes y tengo que fiarme de mi intuición y mantener la mente en blanco, tan en blanco como el manto que lo envuelve todo. Por fin llego a mi destino. No estaba seguro de que lo conseguiría, pero soy del Ejército Zweiräder, nunca me rindo.

General Invierno, esta batalla la he ganado yo, pero algo me dice que será un guerra larga y sin cuartel.

LEBE DIE ZWEIRÄDERRESISTANCE!


lunes, 3 de diciembre de 2012

Sopita (que güínter is camin y luego me pilla desprevenido)

Hoy ha empezado a nevar, bueno a medio chispear blanco, porque ni ha cuajado ni nada. Y por primera vez desde que vi nevar por primera vez (allá por 2005 en Berlín) mi reacción no ha sido de duendecillo de la nieve: ponerme a dar botes de alegría y pensar "por fin ha vuelto la nieve, vamos a jugar, yupiiiiiii", sino que mi reacción fue más bien: tragar saliva, retorcerme de dolor, apretar los dientes y mascullar "ya está aquí la puta nieve ¿quién me mandaría venirme a vivir a Winterfell con lo bien que se está en Dorne?" A lo mejor a esa actitud ha contribuido la infección de garganta que tengo desde el viernes, que empezó como un simple dolor de garganta de los de "me tomo un Algidol y zumbando" y acabó subiéndose el dolor a la mandíbula y al oído (si alguna vez os han extraído al muela del juicio, es ése tipo de dolor), pero como era fin de semana pues no podía ir al médico, así que me he estado aliviando a base de Paracetamol e Ibuprofeno (desde aquí insisto: Nobel de Medicina al creador/descubridor/desarrollador del Ibuprofeno), pero de hoy ya no pasaba, he llamado para pedir hora en le médico y resulta que de doce de la mañana a cuatro de la tarde estaba cerrado, así que he dejado salir a la abuela que todos llevamos dentro y aprovechando que acabo de descubrir un Netto al lado de mi casa (igual que en España el DIA se quedó con los PLUS, en Alemania se los quedó el Netto)  me he ido a comprar cosas para hacerme una sopa casera en condiciones que muchas veces es la mejor medicina (menos para una infección bacteriana, para una infección bacteriana los antibióticos son mejores).

Una cosa muy práctica que tienen los supermercados alemanes (no sé si los españoles también, cuando estoy allí estoy en casa de mis padres y compran ellos) es que lo tienen todo preparado para hacerte una sopa casera. Vamos, que cuando llegué a la sección de verduras, empecé a preguntarme ¿por qué son tan grandes los puerros? ¿cuántas zanahorias compro? ¿no las venderán sueltas? ¿por qué tengo que comprar doce si no quiero tantas? queda un poco cateto pero como lo estoy pensando yo y no me escucha nadie no me importa: ¿qué forma tiene un apio? ¿por qué no lo he buscado antes en Google? Y en esto estaba cuando vi una bandeja ya hecha con tres zanahorias, medio puerro, un taco de apio y un ramillete de perejil listo para hacer sopa, y luego en los congelados un Suppehühner (que es un pollo congelado y limpio para hacer sopa... que digo yo que si lo venden para hacer sopa y no para asarlo y es tan barato será por algo, pero aún así lo cogí). Bueno, a lo que iba, la receta de la sopa:

Ingredientes
Medio pollo o gallina (yo eché uno porque estaba congelado)
2 ó 3 zanahorias
Medio puerro
Un trozo de apio
Un taco de tocino (cualquier grasaza vale si no encontráis tocino. Cualquiera vale, pero no es igual)
Un hueso de jamón (que como aquí no hay pues yo le he echado un trozo de panceta)
Hierbabuena (si tenéis, si no tenéis, no le echéis)
Avecrem
Sal (yo no le he echado, pero es que a veces yo no le echo sal ni a la ensalada)

Lo pones todo en una olla y echas agua hasta que cubra (pero que no llegue al borde), lo pones a fuego medio y esperas a que hierva y el agua cambie de color y se ponga del color del caldo de sopa. Seguramente durante la cocción salga a la superficie una especie de espuma marrón, eso es suciedad y toxinas de la carne, basta con cogerla con una cuchara y tirarla.

Con los tiempos que corren y lo largo que se hace el invierno, con un litro de sopa no tenía bastante, así que he sacado la carne y las verduras, he colado el caldo, he vuelto a poner la carne y las verduras en la olla y he vuelto a echar agua. Seguramente ese segundo caldo tenga menos consistencia, ya lo comprobaré.

El caldo de sopa se puede congelar tranquilamente que no pasa nada, basta con volver a calentarlo cuando vayáis a tomároslo.

Después de sacar el segundo caldo, he vuelto a sacar los ingredientes. Con la carne voy a hacer croquetas mañana y las verduras las he batido, he echado un poco de caldo y agua y ha sido la cena de hoy para Mitbewohner y para mí.

Como dije antes, para un dolor de garganta la sopa va bien, pero para un dolor que se sube hasta las muelas y casi el oído es mejor ir al médico. Ya tengo médico nuevo (a tres minutos de mi casa) y spray para lo que sea que tengo en la garganta

martes, 27 de noviembre de 2012

CLM convoca oposiciones de maestro para julio de 2013

Tonteando en internet en vez de estar poniéndole notas a los exámenes que corregí el fin de semana me he encontrado con esta (a priori) buena noticia: Castilla-La Mancha convoca oposiciones de maestro con 203 plazas para julio de 2012. Y la noticia es de la web de rtve, no del 20 minutos, así que me la creo y me acuerdo de toda la gente que conozco que hizo magisterio, pero no está trabajando de maestro sino que están estudiando oposiciones y me alegro por ellos. Es un proceso largo y bastante jodido: la incertidumbre, el dedicarte en cuerpo y alma a algo que no sabes si dará su fruto y en el mejor de los casos entrar de interino y que te tengan sustituyendo de aquí para allá por toda la Comunidad durante años. Pero es sólo el primer paso, si todo sale bien, algunas convocatorias después, conseguirás tu plaza, trabajarás en algo que te gusta (o al menos un trabajo que has elegido tú) y tendrás estabilidad.

Pero sigo leyendo la noticia y me topo con la siguiente información:
Además del anuncio de la convocatoria de oposiciones a maestro, el consejero de Educación de Castilla-La Mancha ha dado a conocer un proyecto "pionero" por el que los graduados en Magisterio podrán hacer prácticas no remuneradas de 200 horas -veinte horas semanales- en centros educativos de la región entre el 14 de enero y el 22 de marzo, con las que obtendrán 25 créditos que les servirán para optar a las oposiciones de julio. 
Según el consejero, estas prácticas permitirán a los graduados en Magisterio estar más formados y saber desde el primer día cómo es una clase y cómo se imparte en caso de no obtener plaza pero ser llamado después para cubrir alguna vacante como interino.
Que cada cual piense lo que quiera, pero si el consejero de Educación quiere que alguien trabaje gratis, que empiece él mismo a dar ejemplo.

Uno de los grandes fallos de la formación de los profesores de Secundaria en España es la ausencia (o al menos escasez que ralla raya lo absurdo) de prácticas durante la formación. Los maestros no tienen esa carencia. Durante los tres años que duraba la Diplomatura había prácticas cada año (ahora el Grado dura cuatro años, pero el primero no hay prácticas, al menos en la UCO). En total se dedican entre 300 y 600 horas a las prácticas durante la carrera, creo que como "Prácticas de formación" es más que suficiente.

No sólo quiere el señor consejero que los maestros trabajen gratis, sino que además está lanzando el mensaje (consciente o inconscientemente) de que los maestros no están bien formados y por eso necesitan 200 horas de prácticas.

Os estoy viendo venir a algunos, así que a quienes intenten comparar estas prácticas con el Referendariat alemán (que me gusta mucho y del que hablaré otro día), les tengo que decir que hay algunas diferencias esenciales: el Referendariat alemán sí forma parte del proceso de formación que tienen que pasar TODOS los futuros profesores (con muy contadas excepciones) y son prácticas que sí están remuneradas (de aquella manera, pero remuneradas), y no duran dos meses, duran año y medio. Fijaos si es diferente, que dependiendo de la nota de esas prácticas, al final, si todo sale bien, uno ya es funcionario.

miércoles, 21 de noviembre de 2012

Anuncio ahí a la derecha

Me acabo de meter en el blog para recordar como se hacía el pan plano de los burritos (porque como soy tan inteligente se me olvidó apuntarlo en mi libro de rectas, pero eso no viene al caso). Y acabo de ver que sale un anuncio ahí a la derecha. No tengo ni puta idea de por qué. Y yo no cobro por poner publicidad en el blog, así que mejor no pinchéis en la publicidad y si alguien sabe cómo quitarla que me lo diga. No quitarla de darle a la X de arriba a la derecha, que hasta ahí llego yo solito, quitarla de que directamente no aparezca

viernes, 16 de noviembre de 2012

Retomando viejas costumbres

Cuando estuve de erasmus en Berlín hice mil millones de cursos de alemán en la universidad (bueno, a lo mejor exagero, a lo mejor sólo hice cinco), pero como soy así pues se me pasaron los plazos y no pude convalidarlos por créditos de libre configuración, así que a la vuelta tuve que hacer una asignatura más de lo esperado para poder acabar la carrera. La asignatura en cuestión podría haber sido algo relacionado con mi carrera, alguna de las múltiples optativas que me interesaban y que por razones de horarios no pude hacer, alemán I (que me la habría sacado con la gorra) o cualquier asignatura chorra de esas que están simplemente para que la gente se saque los créditos de libre. Evidentemente no lo hice. Me puse a aprender árabe.

Fue un fracaso. Aprobé por los pelos, me bajó la media y apenas aprendí nada. Pero me entró el gusanillo de aprender árabe en condiciones algún día.

Al año siguiente, me fui a EEUU con una beca de Auxiliar de Conversación, como parte de la beca tenía que matricularme de dos asignaturas por semestre. Existía la posibilidad de estudiar árabe. Pero las clases eran a las ocho de la mañana. Escogí "Hollywood Genres". Dejé la clase a la cuarta semana (la condición de las asignaturas era matricularse, no aprobarlas, ni siquiera ir a clase, de hecho aunque hicieras todos los trabajos y aprobaras todos lo exámenes - como hice en el resto de asignaturas - no te podían dar ningún certificado).

El año que estuve en Duisburg me matriculé de un curso en la Volkshochschule (Universidad popular). Era un curso de alemán, demasiado difícil para mí (un C2) porque no había cursos de mi nivel y era eso o un curso de nivel un demasiado bajo. Lo dejé, pero al menos hice un examen del Goethe y me saqué el título del B2 sin apenas prepararme.

Este año me he vuelto a matricular en la Volkshochschule. Adivinad de qué.


El año que me saqué el B2 del Goethe lo único que practiqué fue haciendo algunos exámenes de prueba antes y al final me saqué el título. Ayer hice la comprensión auditiva del C2 del Goethe (para ver el modelo pinchad aquí) y saqué un 80%. Me molé a mí mismo durante un rato. Mucho. Más de lo que se molaría una persona decente. Hoy voy a hacer la comprensión escrita. A ver qué tal. Espero molarme más de lo que marca la decencia otra vez.

Cuando tenía seis años (más o menos, mis padres o mis hermanas podrán decir la edad exacta) intenté freír un huevo porque tenía hambre, pero había nosequién en mi casa y mis padres estaban atendiéndole, así que no me podían hacer la cena. Así que puse la sartén en la hornilla, eché aceite, rompí la cáscara del huevo y lo eché en la sartén y como tenía seis años y no sabía encender una cerilla, tuve que esperar a que mis padres vinieran a la cocina. Desde entonces mis dotes culinarias han mejorado ligeramente (a pesar de todo el camino que todavía me queda); aún así hoy he intentado hacer Pollo al sésamo siguiendo la receta de Morti. Al final ha sido Pollo al ________. Se me ha olvidado echar el sésamo. De todas formas estaba bueno. Lo mejor de la cocina es innovar, experimentar (así aprendí a hacer pan plano del que se usa en los burritos)

Empecé este blog en noviembre de 2008 (justo dentro de dos semanas hará cuatro años, seguro que en el día se me olvida). Cuando no llevaba ni medio año, hubo meses en los que sólo escribí una entrada (y con el blog anterior la cosa fue aún peor el año después de Berlín). Ésa es una costumbre que NO quiero retomar.

miércoles, 7 de noviembre de 2012

Dickens feat. la actualidad



Como filólogo he tenido que leer a Dickens. Como persona a la que le gusta leer he disfrutado leyendo a Dickens. Quienes le hayáis leído recordaréis las escenas del orfanato de Oliver Twist.

Oliver Twist o la literatura del siglo XIX en general. Los Miserables, David Copperfield, o incluso los Episodios Nacionales (que me avergüenza decir que no descubrí hasta esta primavera) nos pueden parecer muy lejanos o incluso exagerados, pero creedme cuando os digo, que no lo son para nada, que hoy día, en nuestras puertas, en nuestras calles y en nuestros Ikeas hay más de uno y más dos.

Hoy he leído un artículo que me ha llegado por casualidad, en un comentario de un amigo en facebook. Comentario a la noticia de los iPads de los diputados. Comentario que reproduzco a continuación:
"Sí digo que los diputados necesitamos disponer de ese dispositivo, para cosas tan esenciales en nuestra función como recibir convocatorias, consultar archivos, comunicar con otros diputados o contar lo que hacemos" 
Mire usted, señor. Yo tengo un iPad. Un capricho, guste o no. Para hacer todo eso que usted dice le valdría, si me apura, con un teléfono con conexión a internet. Pero no seamos tampoco miserables. Concedamos que, obviamente, necesitan algún tipo de dispositivo más flexible para trabajar. Desde luego una tablet no, ya que es un cacharro bastante bastante incómodo para cualquier aplicación ofimática. Pero venga, volvamos a conceder que una tablet. Un iPad? Saben sus señorías que hay tablets que cuestan una cuarta parte y van igual de bien para esas labores?

Cada uno de sus iPads nos cuesta a los españoles, como poco, unos 400€ (menos el descuentito que hayan podido negociar con Apple). Y ustedes los pierden o los 'pierden'. Ayer leía un artículo sobre familias que van a almorzar a Ikea después de las 5 porque hay un precio especial a partir de esa hora, y 10 albóndigas cuestan 1 euro.

Se dan ustedes cuenta, señores hijos de la grandísima puta, de que el pueblo se está muriendo de hambre mientras ustedes se dedican a indignarse porque no les reponen sus caprichos? Sólo les deseo dolor, muchísimo dolor. A nivel físico y emocional. Dolor tan insoportable que no puedan aguantar su piel ni su alma.
Y el artículo del que habla, el que  me recuerda a Oliver Twist es éste.

Gracias Juanlu, por los enlaces a las dos noticias.

sábado, 27 de octubre de 2012

Annerkenung (segundo intento)

Hace un año escribía que no sabía si quería quedarme en Alemania, pero que a pesar de no estar seguro eché los papeles para quedarme. Aunque eché los papeles no estaba muy convencido y en realidad cuando empezaron a ponerme pegas no me alegré pero sí me quitaron un peso de encima.

Sin embargo ahora la situación ha cambiado mucho. Si antes era difícil volverse a España, ahora lo es aún más. Entonces vivía en un pueblo (grande, pero pueblo) donde la vida existía sólo en el trabajo, ahora vivo en una ciudad (mediana, pero ciudad) donde hay vida más allá del trabajo. Entonces mi círculo de amigos se  reducía (con excepciones que se pueden contar con una mano y sobran dedos) a gente que no iba a tardar en irse, ahora sí tengo a más gente que no está allí de forma temporal. Entonces no me veía viviendo para siempre en Öhringen, ahora sí me veo viviendo para siempre en Osnabrück. Entonces la mayoría de mis amigos cordobeses vivían en Córdoba, ahora la mayoría de mis amigos cordobeses viven fuera de Córdoba o tienen planes de salir en menos de un año. Entonces daba igual que hubiera vida antes de las tres de la tarde porque estaba de todas formas en el colegio, ahora salgo de trabajar antes de mediodía (lo que los españoles consideramos "a media mañana") y tengo toda la tarde para hacer diferentes cosas. Entonces buscaba algo, ahora lo he encontrado. Entonces escribí:
Me acojono de pensar que me quedaré aquí atrapado para siempre. Ver a la gente que quiero sólo muy de vez en cuando cuando me den permiso. Me acojono de pensar en lo que estoy haciendo y en lo que conlleva. Me acojono por cambiar el sol de la Corredera por las nubes de Hohenlohe. 
Ahora no siento nada de eso (a pesar de que en Osnabrück el tiempo es mucho peor que en Hohenlohe, que parecía difícil, pero no veas).

lunes, 22 de octubre de 2012

Blogs

Una de las cosas que hago cuando mi vida 1.0 rebaja un poco el nivel de actividad es leer blogs. Bueno, no sólo blogs, también leo novelas, ensayos, teatro, poesía y más cosas. En fin, me gusta leer. Podría hablar del quinto libro de Canción de hielo y fuego (que, por cierto, se me está haciendo larguísimo) o de las historias cortas de Wladimir Kaminer o Frau Freitag (gracias a los que practico la lectura en alemán); también podría hablar de los ensayos de Henry David Thoreau que me estoy leyendo ahora mismo (bendita feria del libro inesperada en Córdoba) o de la literatura hispanoamericana que tengo que leer para mis clases (redescubriendo a Benedetti a mis años, hay que ver). Sin embargo voy a hablaros de blogs; de blogs que si habéis pinchado en el blogroll de la derecha ya conoceréis. Son todos muy interesantes (si no, no los tendría ahí), pero hoy voy a hablar de dos.

Hay uno, que voy a quitar ya mismo, que se llama La hora bisiesta. Es un blog de poesía, pero lleva cuatro meses cerrado porque su autor va a publicar un poemario y los poemas deberían no estar en la red. Conozco personalmente al autor y los poemas son muy buenos; pero no sé si se lo toma con calma para publicar o qué, el caso es que sus lectores llevamos cuatro meses esperando (ejem ejem) y aquí no hay noticias del poemario. Así que para quienes andéis faltos y deseosos de poemas en al red (como estaba yo) os dejo otro blog de poesía, también de una amiga mía, el blog se llama Escribiendo poemas, echadle un vistazo (aunque también lleva tiempo sin publicar, a ver si viendo que de repente recibe muchas visitas se anima de nuevo).

Y otro blog de los de aquí al lado (que por alguna extraña razón se actualiza en el blogroll sólo cuando le da la gana) hoy nos trae una reflexión sobre la escuela concertada (clic) que viene a colación de otro blog que enlaza al principio (os aconsejo que leáis primero la entrada a la que hace referencia). ¿Escuela concertada sí? ¿escuela concertada no? ¿ni sí, ni no, sino todo lo contrario?

Y sí, leo más blogs que no están en el blogroll; y hay más blogs en el blogroll de los que hay hoy en esta entrada; pero de esos hablaré otro día, o mejor descubridlos por vosotros mismos, que siempre está bien descubrir cosas nuevas.

domingo, 21 de octubre de 2012

Dos semanas

Dos semanas hace que no escribo, que no siento la necesidad imperiosa de pinchar en "entrada nueva" y empezar a teclear como si no hubiera un mañana. Eso sólo pasa cuando la vida 1.0 se pone tan interesante que me olvido un poco de la 2.0 (incluso facebook lo he tenido abandonado casi una semana, y por tuiter me han visto poco el pelo últimamente), así que ha sido algo bueno.

Desde mi última entrada han pasado muchas cosas: visitas, bailes, besos y abrazos, intercambios, viajes, confidencias, risas (muchas risas), ilusiones (muchas ilusiones), gente nueva y gente vieja (relaciones por las que parece que después de 22 años no ha pasado el tiempo). Si me paro a contarlo todo os dormís con la entrada, así que mejor resumo mucho y muy rápido.

Hace dos findes vinieron algunos profes visitantes de visita a Osna. Ocho personas (contándome a mí) durmiendo en mi casa; a la vez estaban los alumnos del intercambio (por cierto mi escuela tiene un intercambio con un instituto de Barcelona) y los profes. Con los profes apenas quedé durante el fin de semana, pero con los visitantes descubrí la noche osnabrückesa y otros placeres de la vida. La semana después estuve para arriba y para abajo con la gente del intercambio, y entre otras cosas fuimos al festival de cine independiente de Osnabrück, lo malo es que pudimos ir sólo el primer día, lo bueno es que los demás días no fuimos porque estábamos ocupados en otros menesteres.

El viernes me fui a Bremen con los alumnos y los profesores del intercambio y los alumnos alemanes que van a ir a Barcelona en febrero; estuvimos en el museo de las ciencias y cuando mis alumnos se volvieron a Osna empezó el fin de semana. Llegó Tudelaner, nos tomamos una cervecilla en Bremen y como nos estábamos quedando dormidos, nos volvimos al albergue. El sábado, Tudelaner y yo nos topamos con los barceloneses de casualidad, nos fuimos a comer con los profes y después a recoger a Kitaun, Carabanchelero y al resto de los profes visitantes que pasamos juntos el fin de semana. Cuando estábamos casi todos, nos fuimos a cenar y de cervezas al Schüttinger, que es un sitio donde elaboran su propia cerveza, la cerveza está bien, pero como vayas por la noche pueden tardar un millón de años en servirte (y mejor no pedir comida, porque entonces el tiempo se repliega sobre sí mismo); estando allí llegaron las Sevis (Sevimayor y Sevimenor), que tienen un amigo en Bremen y es donde se quedaron a dormir y al rato Frau Jägermeister y su churri (que también vive en Bremen), nos fuimos por ahí de fiesta y al rato a la cama, que el cuerpo llega un momento en el que dice "basta".

El domingo estuvimos de turismo por la ciudad libre hanseática y de cafés en plan tranquilo, que para algo estábamos de casi vacaciones y el lunes ya nos fuimos al cursillo que teníamos en Etelsen (a veinte minutos de Bremen). Como siempre, el cursillo tuvo cosas muy interesantes y cosas nada interesantes, profesores muy didácticos y profesores nada didácticos y lo mejor empezó cada día a las seis de la tarde, cuando lo único que podíamos hacer era hacer piña entre nosotros jugando al billar tomándonos una Alster (que así se llaman a las Radler en esta zona).

Después del cursillo, mucho estrés el jueves hasta mediodía, tres horas de tren, volver a Berlín sólo para cenar, tomarme una birra, dormir y coger un avión al día siguiente, y el viernes de vuelta para España durante diez días. Una de las mayores ventajas de ser profesor en Alemania es cómo se distribuyen las vacaciones, vale que no haya un verano kilométrico como en España, pero me encanta que no haya casi nunca más de siete semanas seguidas de clase.

Bueno, en realidad en Berlín pasó algo más.

Cuando el tren paró en Spandau (mi parada era la siguiente) y desde el tren vi los S-Bahn berlineses - amarillos con una raya roja encima de las ventanas justo antes del techo - me emocioné mucho, pero cuando bajé del tren en la Hauptbahnhof (la inauguraron cuando yo vivía allí poco antes de irme, así que esta semana ha sido la primera vez que la he utilizado) me acordé del año que estuve allí viviendo, de la gente que conocí, de cómo cambié en apenas unos meses (de cómo me cambió la ciudad) y decidí que sí, que tengo que volver, si no a vivir, al menos de visita con mucha frecuencia, que tengo que llevar a quienes no han estado aún y que tengo que dejar que quienes han vivido allí me enseñen SU Berlín y enseñarles yo lo poquito que queda de MI Berlín (he buscado en el antiguo blog de Morti la entrada sobre el Berlín propio de cada uno, pero no la encuentro, Morti, manfiéstate, por favor). Y digo lo poquito que queda de MI Berlín porque cuando salí el jueves por la noche de la estación de metro de Friedrichstraße no podía ubicarme, todo me era extraño y ésa era la segunda boca de metro que más utilicé durante todo el año después de la de mi propia casa.

Así que espero que pronto haya por aquí una entrada en la que os cuente lo bien que me lo he pasado en la mejor ciudad del mundo y me despido con una cita de Annelise Bödecker:


Die Berliner sind unfreundlich und rücksichtslos, ruppig und rechthaberisch, Berlin ist abstoßend, laut, dreckig und grau, Baustellen und verstopfte Straßen wo man geht und steht- aber mir tun alle Menschen leid, die nicht hier leben können!
Los berlineses son antipáticos y desconsiderados, groseros y autoritarios, Berlín es repulsiva, ruidosa, sucia y gris, hay obras y calles congestionada donde quiera que uno vaya o esté ¡Pero me dan tanta pena quienes no pueden vivir aquí!

viernes, 5 de octubre de 2012

Viento en popa, pero sin creérselo demasiado

Es curioso como cuando todo parece ir viento en popa algo sucede que nos recuerda que no debemos confiarnos. Es curioso como cuando parece que vamos cuesta abajo y sin frenos algo sucede que nos recuerda que no debemos desesperarnos.

El fin de semana pasado no pudo ser mejor, fue tan bueno, que de todo lo que pasó no he tenido tiempo a sentarme a escribir hasta ahora (y en realidad ahora mismo tampoco lo tengo, pero escribir en el blog es una necesidad que tengo, como respirar o como comer). Pero como siempre, mejor empezar por el principio.

Hará cosa de dos semanas me enteré por tuiter de que en el Diario Córdoba buscaban cordobeses que estuvieran viviendo en el extranjero para hacerles una entrevista, así que les respondí al tuit, y al final acabé haciendo una entrevista más larga que un día sin pan que podéis ver si pincháis aquí. A esa entrevista le tuve que añadir unas fotos que hice en esta ciudad y una pequeña entrevista que le hicieron a mi madre y el resultado es que al final el domingo pasado salió un artículo sobre mí en el periódico (página uno y página dos).

Además ese mismo fin de semana seguí explorando la geografía alemana y humana en compañía de más profes del programa, ampliando un poco la familia bajosajona bailando, bebiendo, riendo, fotografiando, besando, paseando, descubriendo, en fin, un fin de semana bastante completito, completo como pocos, de hecho. Desconectado del mundo, de internet, de facebook, del blog de todo, como son casi siempre los mejores momentos.

Y cuando me metí en el correo a ver si me habían mandado el enlace al reportaje, un jarro de agua fría.

Un gran hombre, un mentor, un maestro, un ejemplo a seguir que conocéis apenas tres o cuatro personas de quienes leéis este blog, pero que ha enseñado a enseñar como poca gente es capaz de hacerlo y que la semana que viene tenía que seguir haciéndolo, ya nunca más lo hará. Y la gente para la que era mucho más que simplemente un nombre o una cara, la gente con la que yo podía hablar y desahogarme de verdad están tan lejos que he tardado casi una semana en hablar con la primera. Mañana le entierran en Baden-Württemebrg, donde vivía (aunque era de Palencia... y leísta como buen castellano). Menos mal que aguantó hasta que ya no hubo más profes visitantes en Baden-Württemberg, porque sin él todo sería muy diferente, y no precisamente mejor. Desde aquí mi homenaje.

jueves, 27 de septiembre de 2012

Alemania debe condicionar la ayuda europea a España

Esta mañana me ha llegado un correo de mi primo con la traducción de un artículo que supuestamente se ha publicado en numerosos periódicos alemanes por parte de la periodista Stefanie Müller, correponsal en Madrid del semanario económico alemán Wirtschafts Woche.

Ya lo había visto antes, de hecho entre facebook y twitter, creo que es la quinta vez que me llega en dos días, creo que sabéis a que artículo me refiero, seguro que os ha llegado, es el que se puede ver en este enlace click. La versión alemana, que es la que en teoría se ha publicado en los diferentes periódicos alemanes, la tenéis si pincháis en este otro enlace click.

Como no me creo nada de lo que veo en internet (quizá porque tengo un blog sé de buena tinta la credibilidad que hay que darle a lo que vemos en la red), me puse a investigar y a buscar el artículo original en cualquier periódico alemán. Evidentemente no lo encontré.

[Inciso: ¿Os acordáis cuando Hollande suprimió los coches oficiales? Que risas nos echamos todos ¿eh? click Fin-del-inciso]

Como estuve tres días buscando y rebuscando en google y en todas las publicaciones alemanas que conozco (y son unas cuantas) sin éxito, llegué a la conclusión de que el artículo nunca se llegó a publicar en Alemania. Hoy he encontrado la confirmación por parte de nada más y nada menos que la propia autora en una entrevista. Si no sois muy de leer basta con darle a escuchar y ya oís a la propia Frau Müller decirlo todo bien clarito (que por cierto, ya me gustaría a mí hablar alemán la mitad de bien que ella habla español).

Un par de cosas sobre el artículo, o mejor dicho, los artículos. Lo primero que tienen más razón que un santo; lo segundo, que no vienen a descubrir nada que no supiéramos ya los españoles. Y ¿por qué digo "los artículos" y no "el artículo"? Porque aunque la versión alemana y la española coinciden en un 100% en el mensaje, sólo coinciden en un 70% en el contenido y menos de un 50% en la forma.

Aunque hasta más o menos la mitad se pueden considerar las dos versiones más o menos una traducción relativamente libre una de la otra, a partir de la mitad empiezan a incidir en diferentes cuestiones, igual de importantes en ambos casos.

La versión española (la que habréis leído la mayoría de quienes hayáis leído alguna) habla de la corrupción política, del despilfarro de las diferentes administraciones en nuestro país, del cachondeo con las cifras de déficit público y deja caer que las autoridades políticas en España a todos los niveles son muy poco fiables.

La versión alemana (que seguramente habremos leído sólo algunos frikis que queríamos comparar las dos versiones y algún alemán despistado) incide sin embargo, en el nepotismo, la falta de transparencia y las oscuras relaciones clientelares entre política y empresarios, así como de los peligros de la escasa (si es que acaso existe) separación de poderes que existen en España, y de la nula efectividad de los diferentes órganos de control gubernamental. También dice que los alemanes no explotaron la burbuja inmobiliaria cuando debían, simplemente porque no les convenía, algo que no está en la versión española.

En definitiva, que cuando leáis algo en internet no os lo creáis a la primera de cambio, y que si es una traducción hecha por cualquier fulano aún menos. De cualquier forma lo mejor es aprender idiomas para que no os la cuelen, لهذا السبب سوف تعلم اللغة العربية.

jueves, 13 de septiembre de 2012

Burritos de musaka

Aprovechando que este año los viernes los tengo libres y que hoy es mi primer juernes (jueviernes si lo preferís), me he puesto a cocinar en condiciones, que es algo que no hacía desde antes del verano, y es que, amigos míos, el otoño ya ha llegado al Corte Inglés Alemania. 

La receta de hoy son burritos rellenos de musaka a la aframadre. Que, como bien habréis deducido, aframadre es la mujer a la que toqué en desgracia hace ya casi 30 años y que me ha enseñado, entre otras muchas cosas, lo poco que puedo saber de cocina, la que me enseñó a hacer musaka y pan relleno. Lo de aprender a hacer burritos (el pan de los burritos me refiero) fue totalmente de casualidad, yo estaba intentando hacer otra cosa, y al final me salió lo que me salió (como un día que hice estofado cuando en realidad quería hacer nomeacuerdoyadequé).

Para ¿cuánta gente? Pues con estas cantidades me lo he comido yo sólo, pero comiendo soy una bestia parda, así que estas mismas cantidades valen para dos personas (o para tres si se acompaña de una ensaladita o un postre.

¿Cuánto se tarda? Pues sobre una hora, porque tiene berenjena y tomate, que si tardaran más tiempo en hacerse, acabarían caducándose antes de acabar de cocinarlos. Y todavía más si haces como yo, que cocino con la radio puesta

Para el pan de los burritos
- Algo menos de 200 gr. de harina
- Unos 100 ml. de agua
- Sal.

Se mezcla todo. No hace falta dejarlo reposar, pero se puede. Se amasa y se hace un bola, que si hemos seguido esas cantidades no será mucho más grande que una pelota de tenis.


Se extiende dejando una base muy fina de masa. Y con fina no quiero decir fina como una base de pizza, sino más fina que el borde de un plato, no tan fina que se pueda ver al trasluz, pero casi. Teniendo en cuenta el tamaño de mi sartén y la cantidad de masa que he hecho, me ha salido para hacer Después ponemos la sartén (sin aceite ni nada) en el fuego, esperamos unos segundos a que se caliente y echamos la masa. Vamos sacudiendo de vez en cuando la sartén para que no se pegue y cuando veamos que está por ese lado, le damos la vuelta.


Esto lo podemos hacer antes de hacer la musaka, durante o después, da igual.

Para la musaka
- Una cebolla pequeña
Ya sé que parece grande, pero daos cuenta de que sólo ocupa las dos primeras falanges de tres dedos
- Una berenjena.
- Carne picada (yo he usado unos 100 gramos)
- Tomate (lo suyo es que sea natural, pero yo he usado del que se compra ya triturado, que no tenía ganas de ponerme a pelar y picar, pero igual os digo, con tomate natural el resultado es muchísimo mejor).
No, mi tomate no se descojona de mí por ser un cutre, es que esa es la marca blanca de descuento de mi supermercado


Yo lo que hago es que primero lo pico todo y así no me estreso mientras tengo cosas en el fuego, pero cada uno que pique en el orden que quiera.

La cebolla se pica en dados finitos, para que se poche bien y pronto y no se queme, la berenjena también se pica en trozos pequeñitos, porque es una hortaliza y, como tal, tarda un millón de años (minuto arriba, minuto abajo) en hacerse, así que cuanto más pequeños sean los trozos, menos tiempo tarda en hacerse.

Se echa un chorrito de aceite en la sartén, se enciende el fuego y se echa la cebolla. Cuando esté pocha (floja y más o menos transparente) echamos la carne picada y removemos de vez en cuando para que no se pegue. Entonces bajamos un poco el fuego (que se quede algo más alto de fuego medio) y echamos la berenjena y esperamos a que se haga.

Pero atención, que se haga, no significa que le cambie un poquito el color y se quede así.

Que se haga, significa que se reduzca a menos de la mitad. A los que sois impacientes o recomiendo paciencia, porque lo mismo pensáis "esto seguro que ya está, que ya le ha cambiado el color" y la cagáis... y mucho (tranquilos, todos la hemos cagado alguna vez) hay que remover y esperar, y remover y esperar y esperar... hasta que se quede algo así.

Y todavía tenía que haber esperado más, pero tenía un hambre atroz y todavía me quedaba un rato.
Y ahora le echamos el tomate (si es tomate de verdad, lo habremos pelado y picado en dados antes) y esperamos a que se haga. Una vez que ya esté hecho, echamos parte de la musaka en uno de los burritos, le echamos queso rallado si queremos... 
... y lo enrollamos.
¡Que aproveche!

martes, 11 de septiembre de 2012

Mi nuevo cole

Cuando alguien está de año sabático no está de vacaciones, sino que cambia su tipo de trabajo; por ejemplo un profesor de la universidad que deja su puesto durante un semestre o un año completo para dedicarse a investigar en otra universidad, pudiendo incluso compaginarlo con la enseñanza de algún seminario en esa universidad de acogida.

Pues bien, este año tengo la sensación de estar de año sabático.

El año pasado daba 27 horas de clase a la semana con grupos de entre 22 y 30 alumnos, excepto un grupo de PCPI de 12 alumnos que eran delincuentes juveniles (en algunos casos concretos lo de "delincuentes" hay que entenderlo en el sentido más literal y JUDICIAL de la palabra). Este año doy 16 horas (el año que viene serán 20, porque mi contrato es de 18) y tengo cuatro grupos, todos de Bachillerato. Hoy he conocido los dos grupos que me faltaban. tengo una clase 13 con 14 alumnos, una clase 12 con 13 alumnos, otra clase 12 con 8 alumnos y una clase 11 con 12 alumnos. Eso son 47 alumnos en total, una media de ni siquiera doce alumnos por clase.

Otra cosa no sé, pero tiempo para prepararme las clases voy a tener... y más me vale, porque con estos grupos voy a gastar los materiales a un ritmo que lo voy a flipar.

Pero hay cosas que no cambian; vuelvo a tener clases descompensadas en cuanto a sexos. No pido que haya el mismo número de chicos que de chicas, con que la proporción sea 70-30 me conformo. De mis 47 alumnos de este año hay 4 chicos y 43 chicas.

sábado, 8 de septiembre de 2012

Fortbildung

Es curioso lo poco que escribo cuando conozco a alguien. Esta semana he conocido a los otros 17 que han venido de profesores visitantes y no sé qué escribir, pero bueno, dejaré que fluya y algo saldrá, seguro, que como bien sabéis, cuando me pongo delante de un teclado me olvido hasta de comer.

El miércoles empezó el cursillo para los nuevos, en la Akademie des Sports de Hannover, es algo así como un Centro de Alto Rendimiento para deportistas, y allí estábamos nosotros, que todo el deporte que hicimos fue jugar a los bolos y levantamiento de Kaffe.

Las charlas, la verdad es que por un lado han sido bastante interesantes, pero por otro la mayoría de las cosas ya me sonaban del año pasado o de lo que me había explicado C el lunes, eso sí, sin duda alguna lo mejor de los tres días ha sido la gente; así que paso directamente a las noches (entiéndase que la noche empieza a las cinco y media de la tarde, faltando todavía casi tres horas para que anochezca), que seguro que os interesa más que el currículo de contenidos de español para las clases 6 a 10 de Baja Sajonia.

El miércoles después de cenar (a las siete de la tarde ya nos echaron del comedor) decidimos movernos los dieciocho a la vez e ir al centro, donde acabamos en una Brauerei. De verdad que yo no sé cómo lo hago que al final me acaban llevando a cervecerías, yo que lo único que quería era tomarme un descafeinado tranquilamente en una cafetería y volverme prontito a la camJAJAJAJAJAJAJA. De los diecinueve (también se nos unió la hermana de una chica que ha venido con el programa) hubo gente que aguantó poco, hubo gente que aguantó más, hubo gente que aguantó mucho, y luego estamos los que nos fuimos los últimos. Al principio estuvimos en la parte de restaurante, sentados todos en una mesa larga, charlando de esto y de aquello y al rato se fue la primera tanda; seguimos sentados charlando de lo de más allá y de lo de más acá y se fue la segunda tanda y los que quedábamos decidimos meternos en la parte de discoteca (restaurante con discoteca, un concepto  muy alemán... o lo mismo es que yo soy un poco catetorri y no lo he visto en otro sitio, aunque lo haya). En la discoteca había una fauna totalmente germánica. Entre las señoras del facebook que estaban en la pista bailando entre ellas buscando un lobo que les comiera el tigre, el Elvis sesentañero y el rockero viejo de Love Actually, allí aguantamos estoicamente nosotros, con ayuda de la rubia alemana más apetecible hasta que ya la decadencia decidió por nosotros que teniendo que madrugar al día siguiente era buena hora de volverse a la cama.

El jueves después de la cena nueve de los que estábamos bajamos al sótano, donde había una bolera superextraña. Cuando llevábamos un rato jugando y teniendo en cuenta que no había frigorífico mágico para calmarnos la sed, decidimos subir al bar de arriba a remojarnos el gaznate y a jugar a rojos y negros; pero una vez arriba, vimos que la opción de remojarnos el gaznate en un bar del centro era mucho más apetecible. Definitivamente, son esos momentos con un batido de chocolate o una birrita delante los que nos hacen mejores personas. Y que tengan una baraja de cartas es lo que hace a los bares alemanes ser mejores locales. Allí hablando, jugando, riendo y en definitiva haciendo lo que se hace en los bares, perdimos la noción del tiempo. Cuando la camarera vino a decirnos "vamos a cerrar que esta familia querrá irse", decidimos (contra el sabio criterio de algunos) volvernos a la Akademie, que al día siguiente seguíamos de curso.

Y así llegó el viernes y el curso se acabó a las 15:00 y nosotros nos fuimos a las editoriales a pedirles que nos dieran cositas, que nos pirran los materiales a todos. O mejor dicho, a arramplar con los materiales gratuitos de la Cornelsen; vamos que si la calidad de un profesor se midiera por su capacidad de localizar materiales gratuitos y usarlos luego en clase, seríamos los mejores profesores de toda la Baja Sajonia.

Y el viernes fue el último día, el día cuando acabó todo... o mejor dicho, cuando todo no hizo nada más que empezar ;)

lunes, 3 de septiembre de 2012

Hannover, Piesberg, bici

Mañana me toca dar mi primera clase. Evidentemente en vez de prepararla voy a escribir una entrada (cuanto más larga, mejor) del blog.

El sábado me fui con A a Hannover. A también ha venido a Niedersachsen con el programa, ella está en Stadthagen y la conozco porque es amiga de T, de Baden-Württemberg. A toca el arpa y además de alemán e inglés también habla algo de ruso y de francés, ah, bueno, y es doctora; vamos, ahora descubro que también tiene un blog y ya me quedo muerto del todo (bueno, como Morti, que habla inglés, alemán, francés, ruso y tiene un blog). Pero es buenagente, así que nos llevamos bien. H (mi compañero de piso) es de Hannover y cuando volvió el domingo y le dije lo que había visto en Hannover me dijo "ah, pues entonces lo habéis visto todo, Hannover no tiene mucho más que ofrecer". Vamos, que se le puede llamar la Stuttgart del norte.
Cuando llegamos y nos bajamos del tren, estuvimos viendo un poco el centro histórico y el mercadillo de segunda mano que hay junto al río, el que está junto a las nanas, que son estas esculturas tan "bonitas".

Después del mercadillo y de las nanas, nos entró hambre... y con "nos" quiero decir "a mí me entró hambre y arrastré a A hasta la Braurei más próxima", bueno, más bien nos arrastramos mutuamente, que la que tenía el plano y la que sabía donde estaban las cosas era ella. Allí dimos buena cuenta de una salchichaca de medio metro y un codillaco con su chucrut a mansalva. Después de una comida tan ligerita, lo mejor fue ir a darnos una vuelta por el Maschsee, cerca de donde está el nuevo ayuntamiento.

Y luego, ya después de competir en un triatlón (o más bien, después de pasar por debajo de la meta del triatlón que hubo por la mañana) decidimos que era buena hora para tomarnos un café en la Ballhofplatz, donde la gente se toma el café en las hamacas de la playa.
Y luego, después de pasear por la ópera, el edificio Anzeiger y la galería que pasa por debajo de la estación, ya decidimos volvernos cada cual a nuestra ciudad.

El domingo fue en Osna el festival de Piesberg. Piesberg es una de las siete colinas que rodean Osnabrück. El otro día en la reunión de los profes me dijeron cuáles eran las siete colinas, pero me dijeron ocho nombres, así que cuando se dieron cuenta, me dijeron "pues... tienen que ser siete, así que olvídate de Nossekualberg". Antiguamente, Piesberg era el vertedero de Osnabrück, y aún así las familias iban los fines de semana de excursión a los alrededores; hay costumbres que hay que haber crecido con ellas para entenderlas. Hoy día ya no es vertedero (no me preguntéis donde se llevaron la basura), sino que abajo de la colina está el museo de la industria y arriba del todo hay un mirador. Y entre medias este sábado estuvo el festival de Piesberg. Este festival consiste en puestos de comida y bancos y mesas cerca (todo muy alemán) y un escenario en la parte baja y luego también se puede subir al mirador, para conectar la zona del escenario con la subida al mirador (que hay que hacer a pie) se puede hacer de varias formas, nosotros fuimos C (mi compañera de español), su hijo de dos años, R (a la que yo sustituyo), su novio, y unos amigos de ellas con su hija de dos años. La experiencia estuvo bien, pero quienes estéis acostumbrados a viajar con niños pequeños sabréis que hay que tomarse las cosas con calma y que los carritos de bebé no caben en cualquier sitio.

Y el domingo después de Piesberg y después de que llegara H de su fin de semana recordé por qué decidí venirme a una WG (piso compartido) en vez de irme a vivir solo. Estaba yo delante del ordenador y me salta H: Hast du Bock auf ein Bier? afra: Immer!(1) Y así nos tiramos un rato tomándonos nuestra birrita en la terraza charlando un rato.

Y ya por fin, hoy lunes ha empezado el curso, pero como mi escuela es tan guay, los dos primeros días son de Einschulung, es decir, para que los nuevos se acostumbren a la escuela, explicarles las normas y esas cosas, así que hoy sólo hemos tenido una reunión de departamento, que no sé si ha sido oficial o no, pero me ha venido de lujo (lo que me recuerda que me tengo que leer el curriculum para español, que para algo me lo imprimió C). Y ya por la tarde me he convertido en el orgulloso nuevo dueño de una bici de segunda mano. Bici negra, de montaña y con esparadrapo en el sillín, pero ¿qué más se puede pedir teniendo en cuenta que me la tenía que comprar hoy sí o sí?

(1) H: ¿Te hace una birrita?
afra: ¡Siempre!

viernes, 31 de agosto de 2012

28 horas y media

28 horas y media es lo que llevo en mi nueva ciudad en el momento de empezar a escribir esta entrada. En este tiempo me he dado cuenta de algunas cosas:

- Mi compañero de piso mola un montón (y su novia también, pero ella se va mañana, así que lo mismo hablo poco de ella a partir de ahora)
- Mis compañeros del instituto molan (a su manera) casi tanto como los del año pasado. Sólo he estado con ellos unas horas, podré dar una opinión más profunda dentro de dos años.
- Después de dos años oyendo hablar suabo, el alemán estándar suena raro; se entiende perfectamente, pero suena raro.
- Después de dos años oyendo hablar suabo, se me escapan cosas como "wann fährscht du?"
- Se me olvida pronto que un viaje de siete horas es un viaje mucho más corto que uno de dieciséis horas.
- Dar 16 horas de clase a la semana mola mucho porque tengo los viernes libres (e incluso hay un día que doy sólo dos horas).
- He visto dos tiendas de segunda mano y me han hablado de otra (y eso sin haber salido a explorar) y lo de segunda mano me pirra.
- No llevaba ni 24 horas y ya me han comentado de dos fiestas populares en la ciudad, una este domingo y otra el sábado que viene.
- Me gusta mucho hablar alemán, pero hablarlo sin parar con litro y medio de cerveza en el cuerpo ya cansa.
- Si hay que recenar para conocer gente, se recena; total, H ya me ha dicho dos sitios fenomenales para ir a correr (y ninguno es el que yo había buscado).
- Una persona no puede ser siempre fotogénica, vamos, que cierta personaja sale mal en las fotos que le echa la policía mientras conduce.

Y ahora la parrafada infumable que todos estabais temiendo esperando:

Ayer salí de Málaga sobre mediodía esperando un vuelo de dos horas a los que estaba acostumbrado. Craso error: Málaga está más al sur que Madrid y Bremen está más al norte que Frankfurt. Aunque Ryanair no es Lan Chile (de hecho, se parecen como un huevo a una castaña) el vuelo fue bastante bien. A pesar de haberle dicho a mi padre que sería demasiada casualidad, cada vez que veía a alguien medio joven y solo en el avión sólo podía pensar: "éste también viene a Niedersachsen como yo, de profe visitante". El miércoles comprobaré lo equivocado que estaba.

Después de recoger mi maleta, de quince minutos en tranvía, de una carrerita por la estación de Bremen (para no perder las buenas costumbres), de un trayecto de hora y cuarto que se me hizo mucho más largo que un Heilbronn-Crailsheim a pesar de durar prácticamente lo mismo, y de tirar de la maleta durante 20 minutos por las calles de Osnabrück, por fin llegué a mi nueva casa. Aquí estaba esperándome H (mi compañero de piso), que me ayudó a montar la cama (y menos mal, porque si no todavía estoy liado con las tablas), cuando acabamos, me enseñó el kit de supervivencia del barrio (Rewe, Aldi y el kebab) y nos fuimos a Mister Kebab con su novia, nos compramos la cena y nos pusimos a cenar en el balcón (porque mi piso nuevo tiene un pedazo de balcón, donde cenan tres personas a luz de las velas). A (la novia de H) es más maja: como mañana se va a Escocia durante un año, hoy hacía una cena de despedida con sus amigos en un restaurante que sólo venden Flammkuchen y sin conocerme de nada, me dijo que hoy fuera para allá.

Como hoy tenía el claustro a las 10:30, me levanté con la calma a las 8:00. Lo de "con la calma" va muy en serio, para no llegar tarde al claustro tenía que coger el autobús (la parada está a diez minutos de mi casa) de las 10:15 (en realidad lo quería coger antes para ir tranquilamente a la escuela y hablar con la administradora, darle todos mis papeles antes del claustro, etc.)... por poco pierdo el bus y casi he llegado tarde al claustro; al final llegué el último, pero a tiempo. En el claustro un apunte sobre la personalidad española y alemana. Llegó un momento en el que nos nombraron a los nuevos uno por uno y teníamos que presentarnos. No nos nombraron alfabéticamente, porque si lo hubieran hecho, yo no habría podido ser el primero. Nos presentamos de la siguiente manera:

Afra: Soy fulanito de copas, el nuevo compañero de español, sustituyo a la que había antes y me alegro mucho de estar aquí en Osnabrück con un claustro tan simpático (todo esto en alemán).

El resto (alemanes, que hablan alemán mejor que yo): Hallo.

Después del claustro me fui con la otra profesora de español (alicantina ella) a comprarnos un bocata porque la comida de los profesores de principio consiste en no comer, pegarse una caminata de tres horas y tomarse un café y un trozo de tarta (Kaffekuchen: el mejor invento alemán desde que Guttemeberg inventó la imprenta). Después de eso nos fuimos a cenar de barbacoa. Por lo visto yo me había apuntado para la cena en julio y no me había dado ni cuenta (si es que no aprendo).

Así que cuando llegué a mi casa y llamé a H para ir a donde estuvieran con los Flammkuchen hice de tripas corazón y acabé recenando. Que sí, que también podría haberle dicho "lo siento, pero ya he cenado con los profesrores, nos vemos cuando volváis del restaurante" pero no lo he hecho por dos razones. 1: Acabo de llegar y cualquier oportunidad de conocer gente es más que bienvenida y 2: no soy alemán (esta segunda razón va especialmente dedicada a Frau Casal y a nuestro inofensivo juego de interculturalidad). Así que después de recenar con H, A y algunos de sus amigos, me han invitado a comer con ellos mañana, pero que vaya o no depende del tiempo que pierda en la oficina del padrón, en el banco, en la compañía de salud y llamando a la oficina de hacienda de Öhringen.

miércoles, 22 de agosto de 2012

Duelo de comidas: Umami vs. Handi Rotti

Uno va cumpliendo una edad y cada vez menos dedica la noche a hacer el gamba cual adolescente o joven universitario con riadas de alcohol y más a dejarse llevar por los placeres de la carne, en concreto los placeres del paladar. Quizá agosto no sea el mejor momento para visitar Córdoba, pero tengo las vacaciones que tengo y me tengo que adaptar (además 47 ºC tampoco es para echarse las manos a la cabeza). Hoy vengo a hablar de dos restaurantes que han abierto hace poco en Córdoba: Umami (también conocido como la Salmorejería de Jesús María) y Handi Rotti (también conocido como el buffet indio del Tablero).

Situación
La Salmorejería está en pleno centro, entre la Plaza de las Tendillas y la Mezquita (C\ Jesús María 6), así que es bastante fácil llegar a pie o en autobús. Pero si tenéis que ir en coche, mejor metéroslo en el bolsillo aparcadlo en República Argentina u olvidaos de llevarlo.

El indio está en el Tablero, así que hay que ir en coche o no ir, eso sí, problemas de aprcamiento no hay ninguno.

Servicio
Las dos camareras de la salmorejería que nos atendieron fueron muy amables y simpáticas, en este aspecto muy positivo. Lo único que al ser nosotros un grupo de 11 personas y estar acostumbrados a parejas o grupos pequeños, un par de veces tardaron un poco con la bebida. Un poco, no mucho.

El indio es un buffet, así que cada cual se servía su comida, pero aún así el camarero que había nos informó bastante bien de los precios y lo que eran algunos postres típicos indios.

Comida
Cuando uno va a comer lo más importante es la comida, así que este aspecto es el más importante.

A pesar de lo que alguna gente piensa, en la salmorejería hay más cosas aparte de salmorejo. Nosotros pedimos tres tipos de salmorejo diferentes (normal, meloso y de calabacín, en mi opinión el mejor el meloso), bacalao frito, calabacín con jamón y de postre arroz recubierto de chocolate (buenísimo). Y todo eso con una media de dos o tres bebidas por persona. La comida bastante buena. Además no fue de estas veces que comes tanto que te acaba doliendo la barriga (en mi opinión eso es algo positivo, pero para algunos de quienes fueron conmigo no es tan positivo), pero sí acabamos bastante satisfechos. MUY IMPORTANTE: yo tengo el estómago que con sólo mirarlo ya tengo ardores, así que cenar salmorejo es un suicidio estomacal, pero esa noche no tuve nada de ardores; no sé cómo lo hacen, pero se lo agradezco enormemente.

La comida del buffet indio es mala con avaricia. Cuando uno va a un idio ya sabe a lo que va (o como dice un amigo mío "la comida india pica cuando entra y cuando sale"), pero cuando va a un buffet también, y éste dejaba mucho que desear. Había muy poca variedad y con tres repeticiones yo acabé ya con la sensación de que me rebasaba el estómago (y tengo muy buen saque, que la redondez es el trabajo de toda una vida). El único aspecto positivo es que la bebida (refrescos y agua) se podía rellenar cuantas veces quisieras (recordándome a mi época en EEUU), quizá esas cuatro Coca-Colas de 0,4 litros constribuyeron a acabar tan lleno. Pero vamos, que cuando en un restaurante lo que destaca es la Coca-Cola, malo.

Precio
En la salmorejería no pude ver la cuenta (es lo que tiene ir con los mayores de la familia), pero creo haber oído que al final salió por unos 12-15 € por persona, que está muy bien.

En el indio, con descuentos incluidos (llevábamos 2 x 1 y éramos impares) salió por unos 8,50-9 €.

Resultado
En nuestra batalla de hoy, la salmorejería le gana por goleada al indio. A la salmorejería quiero volver, del indio me llevo acordando toda la noche.

domingo, 19 de agosto de 2012

El mirador de la Fontans

Cuando estuve en Vitoria la última vez, el viernes por la noche me fui de cañas con las tres profes como todas las noches. Pero a las doce, las niñas buenas se fueron a la cama y yo me fui a conocer la noche vitoriana con la mejor guía posible. Eso hizo que salir a cenar y tomarnos una caña y como mucho un carajillo se acabara convirtiendo en visitar la mitad de los bares de la Kutxi (zona de marcha en Vitoria... y fue sólo la mitad porque en una noche no da tiempo de vistarlos todos ni de coña), conocer un montón de gente cuyo nombre he olvidado pero que esa noche me la alegraron y de qué manera e incluso acabar en un local que nunca no siempre es agradable (pero así ya tengo algo que contarle a los nietos).

Ayer fue algo parecido (eso sí, algo menos etílico, que desde hace dos semanas uno ya tiene una edad). Resulta que una amiga mía está ingresada en el hospital y como yo había venido a Córdoba a ejercer de filólogo (que ya era hora) por partida doble y aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid pues al final empezamos la tarde en el hospital (simplemente vistando, tranquilidad en las masas), se nos vino el tiempo encima y el primer ejercicio filológico decidimos dejarlo para otro día. En esas estábamos cuando fuimos a por el segundo ejercicio filológico (en un bar obviamente, que no hay mejor ambiente laboral que rodeado de cañas y con unos kikitos para picar). Cuando ya no había que revisar ningún texto más en inglés miramos el reloj, vimos que eran las 23:30 y nos dimos cuenta de que no habíamos cenado (lo que no sonaban las tripas también nos recordó que teníamos el estómago vacío).

Así que decidmos ir al Moriles y después para casita (si me conocéis ya sabréis que el "después para casita se quedó en la intención"). Nota: Si venís por Córdoba os tengo que llevar a comer a algunos sitios, entre ellos el Moriles. Nota 2: El otro día estuve en la salmorejería, ya escribiré la entrada al respecto, pero en resumen, también os tengo que llevar a comer. Fin de las notas.

Estando allí y después de comer algo así ligerito y dietético como berenjenas fritas con salmorejo, un flamenquín, japuta y ensaladilla con sus cañas y vargas ("tinto de verano" fuera de la capital de los 45 ºC) correspondientes, nuestro grupo aumentó y fuimos a tomarnos el postre a una heladería. Después del helado/granizada/sorbetesvariados la gente empezó a decir "uyqueestoymuycansado" "uyquemevoyamicasa" "uyquenoquieroirmedefiesta" "uyquemañanametengoquelevataralasochoparaveramisobrino" "¡vamonos al Long Rock, vamonos al Natali, vamonos de marcha, vamos a quemar la noche!" (adivinad quien dijo esto último). Así que nuestro grupo empezó a desmembrarse y algunos aceptaron casi a regañadientes ir a por el último fifty al Natali. Es curioso el caso de Baldo, que tenía que levantarse hoy temprano, que vive a 40 pasos del Natali y que dejamos el coche a 30 pasos de su casa. Al final casi a regañadientes (porque a él no le gusta la fiesta, eso lo sabe todo el mundo) se vino, pero poquito rato que tenía que madrugar. Sólo diré que la única noche que he salido en Córdoba este verano hemos vuelto a ser unos cierrabres.

Ya cuando cerramos el Natali y estando para llevar en coche a Baldo a su casa (que, repito, andando habría tardado 3 minutos) al final nuestra conductora se hizo la picha un lío (por tercera vez en lo que iba de día) y entre que se empezaron a oir voces que decían: "vamos a subir al mirador de las niñas" (en la sierra de Córdoba), "vamonos de fiesta" "vamos al McDonald's a por papas", que en el coche había un musicón que aquello parecía más una discoteca que un Citroën Xsara desvencijado (vale, estaba la radio puesta, a lo mejor exagero un poco) y que allí nos habíamos animado todos, al final acabamos en un mirador (de ahí el título de la entrada) con una botella de agua y otra de coca-cola (es lo que tiene ir a un 24 horas a las 4:30 de la mañana, que no te venden alcohol) y patatas fritas, Gublins, pipas y palomitas para acompañarnos mientras intentábamos averiguar que eran todas las luces que se veían en la ciudad. Ya cuando empezamos a oir a las cabras psicópatas asesinas que venían a por nosotras (y cuando empezó a llover) decidimos que después de haber salido para tomarnos algo y volver a nuestras casas a cenar, las seis de la mañana es buena hora para irse a la cama.

En resumen, que así da gusto ayudar a la gente a redactar una carta de motivación en inglés, que es para lo que yo había venido a Córdoba el sábado.

domingo, 12 de agosto de 2012

Alicia

Por alguna extraña razón sigo vivo. Escribo esta entrada con media botella de Bombay Sapphire en el cuerpo, la mitad de mis amigos salmantinos han ido a una boda que desconozco, la mitad de mis amigos cordobeses no sé donde están y yo estoy en Córdoba asándome (casi literalmente) de calor y oyendo ronquidos y quepo en un traje en el que llevaba cinco años sin caber, pero lo importante viene ahora.

Alicia B. R., la tercera sobrina de afra, ya está dando guerra.

Todo lo demás da igual.

Llevo cinco entradas atrasadas de Morti (en serio, cinco es todo un récord, incluyendo a Marylin [que no me gusta, pero Morti hace que por unos minutos sí], y dos de la Mamá alemana, que es más de lo que un expat en su sano juicio puede permitirse), pero hoy no puedo leer y comprender, hoy no leo, no lo comprendo, e incluso la Nena (LA HIJA DE LA DRAMAMÁ) no puede abstraerme.

No sé lo que me deparará el futuro (ojalá sea el último verano así) pero por ahora no hay ni 2. Staatexam ni "Beamte auf Lebenzeit" Prüfung ni nada por el estilo. Por ahora sólo hay una visita al hospital y unas lágrimas que esperan oír "tito" para salir a borbotones. Unas manos diminutas que me hacen saber que TODO lo que merece la pena me está esperando mañana en la Cruz Roja.

Y de repente todo da igual. Todo de lo que llevo queriendo escribir desde hace un mes no importa porque hay esperanza. Porque nosotros damos igual, porque dentro de un tiempo no sé si mucho o poco nosotros daremos igual. Ellos serán el futuro.

La gente a la que yo le doy clase, la gente a la que nunca le daré, son el futuro y nosotros sólo seremos un punto en la historia sin importancia, sólo auparemos a lo que Ortega llamó la Intrahistoria. Y ¿sabéis qué? Que por primera vez en mi vida soy consciente de que me olvidarán y por primera en mi vida soy consciente de que me da igual. La Intrahistora me la pela, la Historia (así en mayúsculas) me la pela aún más.

Hay tres personajillos (eran dos hasta hoy, no sé al final cuántos serán) que quiero que me recuerden y cuando ellos se vayan ya nada importará. Así que si dentro de unos de unos años, cuando yo no sea más polvo que Juan Preciado (hijo de Pedro Páramo) y nadie me recuerde, y no sea más que unas letras en un blog que borrarán, no me importará. Ángela, Pablo, Alicia (y los que vengan) tendrán mi huella, aunque ellos no lo sepan (igual que yo no sé de quién tengo la huella). Y entonces nadie sabrá quien soy pero ¿sabéis qué? Que no me importa. Que las lágrimas que derramo mientras escribo esto dan igual. Porque de alguna manera sin que alguien lo note (o notándolo alguien) yo estaré ahí.

Así que, sin que nadie se emocione más de la cuenta, amigos míos, hasta la próxima, que, os aseguro, será pronto.

miércoles, 25 de julio de 2012

With love from Öhringen

Se acabó. Esta es la última entrada que escribo desde Öhringen. Llegué aquí hace dos años con una maletica llena de ropa, con mucha ilusión, sin muchas expectativas, sin conocer a nadie y sí, con más acojone del que nunca admitiré.

Casi dos años después tengo que decir adiós (o mejor "hasta la próxima"). Me voy de aquí. Me he quejado mucho, muchísimo, de Öhringen y de algunos de mis alumnos. Y al final resulta que me gusta y todo. Que le he cogido cariño (aunque en realidad cogerle cariño a la gente de este colegio y de este pueblo en general es realmente fácil) y que me da pena irme.

Después de tres experiencias anteriores parecidas, lo lógico sería que me hubiera acostumbrado, pero no. Me sigue dando una pena enorme dejar un hueco como el que dejo; me sigue quedando un agujero enorme cuando me voy y me alejo de gente con la que he compartido tanto.

Hoy ha sido la última GLK (claustro) de mi colegio a la que voy a asistir. Y la última vez que he visto a mucha de la gente del colegio. Mañana es el último día en el cole, después me voy a Múnich y el lunes me mudo a Osnabrück del tirón. Tengo ganas de vacaciones, pero sigue sin gustarme tener que decir adiós. Tengo ganas de Osnabrück, de vivir en una ciudad, pero no de dejar a la gente de aquí.

Sin embargo, como siempre, voy sin expectativas, a ver qué me encuentro, a darlo todo sabiendo que algo recibiré, si mucho o poco ya veremos.

jueves, 19 de julio de 2012

La familia

- Señor R, usted ¿tiene a su familia en España?
- Sí, claro (¿o es que con este acento mío perfecto pensabas que soy hijo de inmigrantes criado en Alemania?).
- Y ¿Por qué está aquí en Alemania?
- Porque aquí tengo un trabajo y de algo hay que vivir.
Ésta fue una de las últimas conversaciones que tuve ayer con una de mis clases (bueno, lo que está entre paréntesis no lo dije, lo pensé). Al poco rato caí en la cuenta de lo que querían decir.

En España (y en prácticamente todas las culturas mediterráneas) el concepto de familia incluye padres, hermanos, tíos, primos, abuelos... y cuando uno se casa y empieza a venir la prole, se añaden (ojo, SE AÑADEN, no sustituyen a lo anterior) hijos, nietos, sobrinos, cuñados... Y ya luego están los casos extremos como el mío (que voy por la calle abrazando a la gente) que cuando me embalo meto también a los suegros de mis hermanas y las hermanas de mi cuñados. Vamos que para nosotros la familia son las personas que invitarías a tu boda o las personas a las que ves por la calle y te paras, les das un abrazo, dos besos y os ponéis a hablar y pierdes el autobús y llegas tarde al trabajo, pero da igual porque estás hablando con la familia y eso es más importante que el trabajo o el autobús, que al fin y al cabo llegará otro dentro de 5-10-15-20 minutos (aunque yo mejor me voy buscando otros parámetros porque, como dice mi hermana, cuando voy por la calle me paro a hablar hasta con las hormigas).

En Alemania el concepto de familia es bien distinto. Cuando el primer mes de clase de español enseñamos la familia con el árbol genealógico de los Pérez Rodríguez (quiero hacer una clase con mi árbol genealógico, que se van a cagar los alumnos) para que le pongan cara a los conceptos de padre, madre, hermano, hermana, abuelo, abuela, tío, tía, primo y prima (y ya está, sólo esos diez), los alumnos se quedan a cuadros y al momento dicen "Ach so! Nicht die Familie, sondern die Verwandschaft!" (Ah, no la familia, sino los parientes). Cuando le ocurre esto por primera vez, al españolito recién llegado a Teutonia sólo se le pasa una idea por la cabeza: "Desde luego, hay que ver lo chominosos que son mis alumnos". Y luego, con el tiempo aprende que hay conceptos que son totalmente diferentes en ambas culturas.

Aquí en Alemania el concepto de familia incluye a padre, madre, hermano, hermana (y todas sus variedades acabadas en -astro, -astra) y pare usted de contar. Bueno, en el caso de familias muy muy muy muy unidas, también incluye a los abuelos (si no viven a más de 50 kilómetros, claro). Pero eso es hasta que uno cumple más o menos 23 años. Entonces deja de tener familia y todo lo anterior se convierte en Verwandschaft (parentela), luego llega un momento en el que se casa y se olvida de que una vez tuvo padres y su familia se convierte en marido/mujer y churumbeles.

Será por eso que mis alumnos lo fliparon un poco cuando les dije que tengo a la familia en España, lo mismo me imaginaron cual Carlos Iglesias en Un Franco, 14 pesetas mandando dinero a España cada mes para mantener a mi familia. Pero oye, que me hubieran preguntado como me lo preguntaron en una de las entrevistas de pisos que hice en mayo:
- ¿Pero tienes familia propia?
- No (la alquilo por horas, no te digo)
Menos mal que sabía a lo que se referían, si no habría sido yo quien hubiera flipado en colores con la pregunta.

lunes, 16 de julio de 2012

A todo se acostumbra uno

Siguen sin gustarme los fines de curso (aunque éste esté siendo especialmente amargo más allí que aquí), pero ya lo dice la sabiduría popular: a todo se acostumbra uno.

Este fin de semana ha sido la despedida de los últimos de Filipinas; sólo quedarán Marta y María para recordarle a Baden-Württemebrg que en 2010 llegaron nueve locos a enseñar español, nueve tipos que se dedicaban a jugar al billar en un sótano, a hacer carreras de sillones con ruedas por los pasillos, que de vez en cuando quedaban para comer pulpo en una cocina pequeñita (bueno, sólo lo hicieron una vez), y también a hacer barbacoas en un castillo de Hohenlohe; nueve tipos que compartían materiales en la nube, pero que les unía mucho más que una cuenta de dropbox; ocho tipos con un sobrino en común (pero que sólo compartía genes con la novena); nueve tipos que cuando llegaron a Baden-Württemebrg, media hora les parecía un viaje larguísimo, pero al poco tiempo estaban deseando meterse cuatro horas de tren; nueve tipos que al final se separaron sólo para encontrarse de nuevo alguna vez en algún lugar.


Ahora mismo acabo de llamar para dar de baja la televisión y la electricidad a finales de mes, y esta semana iré a darme de baja del ayuntamiento. Siguen sin gustarme los fines de curso. Sigue sin gustarme saber que voy a echar de menos a la gente. Pero al final se hace callo y a todo se acostumbra uno. Si la última noche de Berlín se me hizo un vacío en el estómago, este fin de semana me he despedido de la gente sin apenas darme cuenta de que ya se acaba este capítulo de la historia. Vamos, que todavía no me he dado cuenta; me daré cuenta cuando empiece a meter las cosas en cajas, cuando quite los pósters de la pared, cuando vacíe los armarios y rellene las maletas, cuando salga por última vez de la sala de profesores. Me daré cuenta pasado mañana cuando tenga las primeras "últimas clases" de este curso.


Y así se acerca ya el final de este curso poco a poco y sin verlo venir; será verdad eso de que a todo se acostumbra uno.

miércoles, 11 de julio de 2012

Un poco de historia

Hay quien opina que estudiar historia sólo sirve para poder ganar el quesito amarillo cuando juega al Trivial. Hay quien opina que los periódicos sólo sirven para entretener la vista mientras uno va en el autobús o para simular que está haciendo algo importantísimo cuando alguien quiere decirle algo pero no tiene ganas de escuchar. Quizá sea verdad. O quizá no.

U.D. 1: El pasado reciente
Quienes tengáis facebook estoy seguro de que habréis visto hoy la siguiente imagen (o una muy parecida) hasta la saciedad. Quienes no tengáis facebook, seguro que la recordáis, pues apenas hace dos años de la misma.


Si intentáis acceder a la página, comprobaréis que no está activa. Desde cuándo está inactiva no lo sé, pues yo acabo de intentarlo ahora por primera vez. Pero parece ser que éste (clic) es el caché (copia de una página web) y resalto lo de "parece ser" porque como todo lo que hay en internet, uno nunca puede fiarse.


En esa página se puede leer:



"En el año 93 subió el IVA del 12% al 15% y el resultado fue que 500.000 españoles fueron al paro y la economía decreció un 2,5%. El déficit público alcanzó la entonces cifra récord del 7,4%.
Para colmo la recaudación por IVA disminuyó. Ni mejoraron las cuentas públicas, ni el empleo ni la economía, sumida en ese momento en otra crisis que comparativamente no era tan grave como la de ahora."


U.D. 2: El siglo XX
Entre los años 50 y 70 del siglo XX se calcula que entre un millón y medio y tres millones de españoles emigraron. Los destinos principales fueron países de la Europa occidental (sobre todo Francia, Alemania y Suiza).

Dada la situación económica en España a la mayoría de esos emigrantes no les quedó otra salida que dejar a sus familias en España mientras ellos iban al extranjero a ganar dinero, que en su mayoría mandaban a España.

Seguramente sería un absurdo decir que esos emigrantes fueron expulsados de su país, en realidad nadie les prohibió quedarse en España (lo que se conoce como exilio). Sin embargo, tampoco se puede decir que su salida fuera de forma totalmente voluntaria, simplemente una elección personal. Aunque no hubiera una ley que les obligara a irse, la situación forzó su marcha.

U.D. 3: Hace mucho mucho tiempo
Según la teoría de las migración, una emigración puede ser voluntaria (de la que hablábamos antes) o forzosa, es decir, en la que el gobierno obliga a un grupo de personas a abandonar el país. La diferencia con el exilio (o destierro), es que el exilio es individual, mientras que la migración forzosa se aplica a un grupo.

En la historia de España ha habido dos grandes salidas forzosas: la expulsión de los judíos de 1492 y la expulsión de los moriscos de 1609.

Sobre las razones quizá no viene a cuento hablar ahora mismo, pero sobre las consecuencias, quizá no esté de más copiar un párrafo entero de la wikipedia, que lo explica mucho mejor que yo:

"La expulsión de un 4% de la población puede parecer de poca importancia, pero hay que considerar que la población morisca era una parte importante de la masa trabajadora, pues no constituían nobles, hidalgos, ni soldados. Por tanto, esto supuso una merma en la recaudación de impuestos, y para las zonas más afectadas (Valencia y Aragón) tuvo unos efectos despobladores que duraron décadas y causaron un vacío importante en el artesanado, producción de telas, comercio y trabajadores del campo. Muchos campesinos cristianos además veían cómo las tierras dejadas por la población morisca pasaban a manos de la nobleza, la cual pretendía que el campesinado las explotase a cambio de unos alquileres y condiciones abusivas para recuperar sus “pérdidas” a corto plazo."
Conclusión
Seguramente estos tres hechos de la historia de España no tengan nada que ver el uno con el otro. Pero hay quien dice que la historia es cíclica y que siempre se repite. 


Y como hay quien me dice que a mis entradas le sobran palabras y le faltan imágenes, para despedirme os traigo una pintura histórica que seguro que sabéis quién la pintó y qué representa.




jueves, 5 de julio de 2012

Fin de curso diferente

Hace más o menos un año escribía:
Mi queja de hoy es por el trabajo... bueno, más bien por el no-trabajo. No, no es que me haya quedado en paro (...), es que aquí después de poner las notas y que sean las evaluaciones sigue habiendo clases. Pero claro, ni los niños tienen ganas de estudiar, ni los profesores de dar clase, sabiendo que lo que dicen entra por un oído y sale por el otro. Así que (...) me invade la apatía. 
Pues a pesar de que la situación es bastante parecida, este año me siento muy diferente. A lo mejor es saber que en septiembre me toca empezar de nuevo en otro sitio totalmente diferente. A lo mejor es que veo las cosas con otra perspectiva, a lo mejor es que soy un año más viejo, a lo mejor es que aunque ya no tenga que preparar clases todavía me quedan exámenes por corregir (no, definitivamente no es eso), a lo mejor es que no tengo la prisa ansiedad por estar en otro sitio que tenía el año pasado.

El caso es que ahora me alegro de tener estos veinte días sin el estrés de las clases, pero sin la inactividad total que le parte a cualquiera por la mitad.

No se acerca el 31 de diciembre, pero sí que es el momento de echar la vista atrás y ver que a pesar de que no se planteaba tan bueno como el año pasado (sobre todo porque sabía que iban a faltar mi gallego y mi ibicenca favoritos) al final ha resultado un año bastante bueno, lleno de esas casualidades que te cambian la vida (o al menos te alegran el finde), con más viajes de los que me esperaba (aunque siempre cabe alguno más) y lleno de buenos momentos. Un año con decepciones que al final resultaron ser más alegrías que otra cosa, con reencuentros que fueron incluso mejores que los primeros encuentros.